Contar con un sistema de calefacción y agua caliente en casa es muy gratificante, pues nos permite combatir las inclemencias del clima en invierno. Sin embargo, es importante darle el mejor cuidado al aparato que tengas instalado para disminuir cualquier riesgo de avería. Por ello, aquí te explicaremos cómo se realiza el mantenimiento de una caldera.

Como explicamos en nuestro artículo sobre los tipos de caldera que existen, los sistemas más comunes para uso doméstico funcionan a gas. Por ello, tomaremos como referencia ese tipo de caldera.

¿Por qué es importante darle mantenimiento a tu caldera?

Existen dos razones principales por las que resulta fundamental que tu caldera pase periódicamente por una sesión de mantenimiento. La primera tiene que ver con asegurarte de que siga funcionando de diez y que su vida útil se prolongue durante muchos años.

La segunda razón escapa un poco de tus manos: es obligatorio por ley que las calderas domésticas pasen por revisiones e inspecciones, con una periodicidad que va desde un año a cinco años, según el tipo de instalación que tengas en casa.

En cualquier caso, las tareas de mantenimiento deben ser realizadas por un técnico o una empresa especializada, como es el caso de We Check Mallorca. Gracias a nuestra experiencia, evitamos cualquier inconveniente con el gas natural o los humos de combustión, garantizando tu seguridad y la de tu familia.

Dato: El Plan de Ahorro Energético aprobado en agosto del 2022 dispone que todos los edificios con alto consumo en climatización realicen una revisión de sus calderas antes del 31 de diciembre, si es que no lo han hecho después del 1 de enero del 2021.

Mantenimiento de la caldera: revisión e inspección

El mantenimiento de una caldera de gas pasa por dos etapas bien diferenciadas: revisión e inspección. Es importante que conozcas cada una para no caer en confusiones.

Inspección del gas:

El trabajo de inspección se centra particularmente en las instalaciones del gas, como el contador, las llaves, las tuberías, las gomas, entre otros elementos, incluyendo la estanqueidad de todas las uniones. La compañía distribuidora debe contactar al usuario para realizar los trabajos, pero si lo deseas puedes contratar a una empresa particular.

Las inspecciones de calderas son obligatorias cada cinco años en Islas Baleares y el resto de comunidades autónomas, salvo en País Vasco, donde se realizan cada cuatro años.

En relación al pago, este se realizará directamente en la factura de gas de la distribuidora, y no al técnico que acuda a tu casa a hacer el trabajo.

Revisión de la caldera:

La revisión es un servicio de mantenimiento enfocado en la propia caldera. Según el Reglamento de las Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE), la responsabilidad de su cumplimiento recae en el propietario, quien podrá solicitar el servicio de cualquier personal autorizado.

Entre las tareas de revisión más importantes figuran la conservación y limpieza de las partes de la caldera, cambio de piezas averiadas, análisis de la combustión, verificación de la temperatura del agua y presión, purga de los radiadores, entre otras.

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