El tiempo de vida de una nevera promedio oscila entre los 9 y 13 años. Aunque sería excelente que todo ese tiempo transcurra sin incidentes, esto no ocurre en la mayoría de los casos. Es frecuente que, de un momento a otro, la nevera deje de enfriar. ¿Qué podría estar ocurriendo?
Si tu frigorífico no enfría correctamente o simplemente deja de hacerlo, los alimentos que tienes almacenados podrían descomponerse en muy poco tiempo, especialmente las carnes, el pescado y los productos lácteos. Ello podría suponer un grave riesgo para tu salud y la de tus familiares, por lo que no es un asunto menor.
Antes de explorar las posibles soluciones a este problema, es preciso determinar cuáles fueron las causas. Sigue leyendo para saber cómo proceder en caso tu nevera deje de enfriar de un momento a otro.
¿Por qué tu nevera no enfría correctamente?
Existe un amplio rango de posibles razones por las que tu nevera podría no enfriar. Estas son las más frecuentes:
Termostato mal regulado
Una mala regulación del termostato podría ser el origen del problema. Esto ocurre cuando subes la temperatura fuera del rango normal para evitar un gasto energético excesivo, lo que reduce la capacidad de la nevera para enfriar.
Sobrecarga de alimentos
Cuando almacenas demasiados alimentos y bebidas en la nevera, corres el riesgo de obstruir las salidas del aire y ventilación. La consecuencia directa de ello que su capacidad de enfriamiento se reducirá drásticamente.
Abrir la puerta demasiadas veces
Durante el verano es frecuente abrir la puerta del refrigerador varias veces. Sin embargo, esta práctica ocasiona que el calor ingrese al interior, intercambiándolo por frío. Esto puede ralentizar el proceso de enfriamiento. Un indicio de que esta es la causa del problema es que el congelador sí enfría, pero la nevera no.
La nevera está desconectada
Sí, puede sonar un tanto absurdo. Sin embargo, como especialistas en reparación de neveras, hemos tenido casos en que el problema es que el electrodoméstico se desenchufó de la corriente eléctrica. Verifica la conexión y comprueba si es que la toma de corriente funciona con otros dispositivos.
Problemas técnicos
Las neveras funcionan gracias al trabajo conjunto de varios componentes, incluyendo el evaporador, compresor, condensador y válvula de expansión. Si alguno de estos elementos presenta avería, se verá comprometido el funcionamiento de todo el sistema.
¿Cómo solucionar el problema?
La mejor forma de reparar una nevera que no enfría es llamando a un servicio técnico especializado. Sin embargo, hay algunas cosas que puedes hacer antes de dar ese paso.
- Regula la temperatura del termostato a un nivel intermedio, que podría estar entre 4 y 5 grados.
- Prueba trasladando la nevera a un espacio fresco, que no tenga contacto directo con fuentes de calor como hornos, calefacciones o luz solar.
- Comprueba si la puerta cierra bien. Un truco para ello es colocar un billete entre la goma y la puerta. Si puedes extraerlo fácilmente, entonces hay fallas en el cierre hermético y podrías considerar reemplazarlo.
- Si ves que tienes muchos alimentos guardados, retira algunos que no tengan riesgo de descomponerse. Si el problema se corrige, es posible que necesites una nevera más grande.
- Desenchufa la nevera y limpia los serpentines del condensador situados en la parte posterior, en caso tengan polvo y pelusas acumulados.
Si no has logrado identificar la causa del problema, difícilmente encontrarás la solución. Ante estas situaciones, la mejor alternativa es consultar con un técnico especialista. Si te encuentras en Mallorca, puedes recurrir a nuestro equipo.
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