La utilidad de las lavadoras es increíble. Con solo presionar un botón, podemos lavar y secar la ropa en cuestión de minutos. Sin embargo, es importante no abusar de los beneficios que ofrecen y realizar un mantenimiento frecuente para evitar averías y alargar la vida útil de nuestra lavadora. ¿Te gustaría aumentar la vida útil de tu lavadora? En esta breve guía te dejamos algunos consejos.
Puede resultar un tanto irónico que una lavadora necesite limpieza. Pero se trata de una actividad fundamental. La ropa suele dejar pequeños residuos y moho que quedan almacenados en los componentes de la máquina, y pueden restarle efectividad si es que dejas que se acumulen.
Limpia tu lavadora con frecuencia
Una limpieza regular de tu lavadora es la mejor manera de aumentar su vida útil por muchos años. Como expertos en el rubro, te recomendamos utilizar una solución especializada, o bien productos que probablemente tengas en casa como vinagre y lejía. Todos estos insumos son seguros y efectivos, así que no dañarán el equipo.
Elimina la suciedad del filtro
Las lavadoras cuentan con un filtro de pelusas que atrapa elementos sólidos durante el proceso de lavado, como trozos de papel húmedo, pelos, monedas, clips, entre otros. Pero en algún momento el filtro se llenará de desechos y dejará de cumplir su función, afectando el rendimiento del equipo.
Por ese motivo, es importante que elimines la suciedad del filtro con regularidad. Este dispositivo suele estar ubicado en la parte inferior de la lavadora, detrás de una tapa. Si tienes problemas para hallarlo, te recomendamos consultar el manual del fabricante.
Evita la sobrecarga de ropa
Colocar en la lavadora una carga de ropa mayor a la recomendada suele tener efectos negativos. Por un lado, tu ropa podría estropearse o quedar con un olor desagradable. Y por otro, el propio electrodoméstico corre el riesgo de estropearse.
El tambor de la lavadora debe quedar con suficiente espacio libre para que el detergente se disuelva correctamente y no deje manchas en la ropa. Por otro lado, el exceso de prendas ejercerá mayor presión sobre el tambor, en especial en la parte de centrifugado. Ese desequilibrio puede ocasionar que la correa de transmisión se rompa y que la lavadora deje de funcionar.
Utiliza un detergente adecuado
No todos los detergentes son adecuados para tu lavadora. Desde WeCheck te aconsejamos buscar uno que sea compatible con la marca y el modelo que tengas en casa. A modo de ejemplo, las máquinas de alta eficiencia funcionan mejor con detergentes HE (High Efficiency) de baja espuma.
En algunos casos es conveniente usar detergente líquido en vez de en polvo, ya que estos últimos podrían perjudicar las rendijas de metal con el paso del tiempo, afectando la vida últil de la lavadora.
Deja abierta la lavadora después de usarla
Después de lavar tu ropa, la lavadora quedará húmeda, lo que a su vez puede provocar la proliferación de moho y hongos. Para evitarlo, solo debes dejar la puerta abierta durante unos 20 minutos para que se seque. También puedes limpiar el interior con una toalla seca.
Poniendo en práctica estos consejos prácticos, ten por seguro que tu lavadora te acompañará por varios años sin perder eficiencia. Si quieres conocer 7 tips para el mejor cuidado de tu lavadora, échale un vistazo a nuestro artículo.